Nacida el 26 de octubre de 1955 en Zurich, Suiza. Pero tenía la nacionalidad argentino-alemana. Estudiante en el conservatorio de Música, ya que guardaba pasión por la misma, llegando a cantar en el coro de la Catedral de San Isidro. Allí creció en la zona bacana del Norte de la provincia de Buenos Aires. Fue al Colegio Alemán de Martínez y practicó equitación en el Club Hípico del Norte. Trilingue, también hablaba inglés y alemán. Vacacionaba en Villa Gesell. Hay quienes dicen con razón, que era sobrina del mítico empresario peronista Jorge Antonio. Le decían “Gringa” ó “Laura”. Militante de Juventud Peronista. Sale del país a fines de 1976 al caer su casa, un departamento del barrio capitalino de Once. Se radica en España donde forma pareja con el “Chino” Ernesto Ferré Cardozo (ver su registro). Miliciana del grupo de Tropas Especiales de Infantería (TEI) del Ejército Montonero volvió el 10 de febrero de 1980 a la Argentina –vía Chile- para combatir a la dictadura militar. Fue secuestrada-desaparecida por adscriptos a Inteligencia de Ejército, el 28 de febrero de ese mismo año en una cita “envenenada”. Su hermano Benjamín escribe lo que sigue: “El 23 de noviembre de 1979, la Gringa sacó del atril las pocas partituras de folclore que tenía, enfundó la guitarra y dispuso una lista de las cosas que dejaría guardadas en casas de amigos. El charango, las quenas, algunos libros y la ropa de invierno. Extendió prolijamente sobre la mesa una de sus hojas de colores y se dispuso a escribirle a Abi (su padre, Rubén Antonio) una última carta (…) Había llegado el momento de comprobar –textual- si era peor morir de tristeza que morir luchando por la verdad, por un ideal. Y escribe –también textual- ‘que el sentimiento más fuerte que estoy viviendo, es el de la inmensa responsabilidad que tengo por mí misma, por los demás compañeros y por nuestro pueblo’. ¡Miriam vive, ahora y siempre!”.