“Manolo”. Nació en La Plata el 16 de enero de 1955. Estudiante de Periodismo en la Escuela Superior de su ciudad natal. Detenido-desaparecido junto a su esposa Anahí Silvia Fernández de Mercader por fuerzas policiales, el 10 de febrero de 1977. Mario tenía 22 años y trabajaba como técnico electricista; Ana, 21 y como ama de casa, cuidaba a sus dos hijas. Los secuestraron en su domicilio de Tolosa (calle 119, número 833), en los alrededores de La Plata y los pasearon por diferentes comisarias y campos clandestinos (Comisaría 5° de La Plata, Pozo de Bánfield, etc.) hasta que decidieron matarlos por separado. Mario, militante de Juventud Peronista (JP) y Montoneros, estaba herido en una pierna porque cuando vio a la patota de 7 tipos armados en su casa, trató de huir y lo balearon. Antes de la “solución final”, perversamente le hicieron creer a Anahí que iban a liberarla por lo que le consiguieron ropas de otras desaparecidas y dejaron que se despidiera de su esposo. El testimonio de un familiar, Ana Mercader es alucinante: “La familia nunca los dejó de buscar. Apelaron a todos los que pudieron, incluyendo a Monseñor Plaza, quien le dijo a la madre de Anahí que le pasaría información a cambio de tener relaciones sexuales con él. Héctor Flores, un comandante principal de la gendarmería nacional, le hizo una propuesta parecida”. El sábado 13 de octubre de 2012 en el Panteón de “Memoria, Verdad y Justicia” del cementerio de la ciudad de La Plata, fueron inhumados sus restos, encontrados como N.N. en la necrópolis de Avellaneda.