Roberto
Baschetti

Ayala, Cayo Sotero

“Fue un dirigente muy querido y un gran amigo. Era un obrero peronista, de ideas muy firmes respecto a la defensa de los intereses de la clase trabajadora y con una visión muy clara acerca de la construcción estratégica de lo nacional” expresó Julio Fuentes en alusión al dirigente naval que falleció el lunes 4 de enero de 2016, a los 78 años de edad. Compañero entrañable para la militancia de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Confederación de Trabajadores Argentinos (CTA) durante la resistencia al neoliberalismo en los ’90, Ayala –chaqueño de nacimiento- fue anfitrión del encuentro sindical que daría precisamente origen a la CTA, conocido como “El Grito de Burzaco” en el predio del Sindicato de Obreros Navales que él conducía (año 1992). Pero su entrega sin descanso a la causa obrera y su lucha venían de mucho tiempo atrás. Trabajó en una aceitera de los 16 hasta los 19 años. Comenzó su actividad gremial desde muy joven (delegado de Astilleros Callan) y a los 21 años ocupó la secretaría gremial del Sindicato Argentino de Obreros Navales. Durante la Resistencia Peronista ocupó la secretaría general de su gremio y trabajó incansablemente para lograr la unidad del resto de los trabajadores y sindicatos del sector portuario, marítimo y naval. Así mismo fue parte de la histórica CGT de los Argentinos que lideró Raimundo Ongaro. Se sumó a miles de militantes peronistas para hacer realidad el “Luche y Vuelve”. A fines de los ’90 fundó junto a otros compañeros trabajadores, la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina (FEMPINRA). Con el regreso de la democracia también fue senador provincial por Buenos Aires. El fundador de la CTA y secretario general de la misma entre 1997 y 2006, Víctor De Gennaro, apesadumbrado por el deceso del compañero Ayala nos dice: “Te nos fuiste Cayo. Justo ahora que los poderosos, tilingos y autoritarios vuelven con todo para profundizar la entrega y el saqueo, insensibles al padecimiento de nuestra gente (…) Te vas en estos momentos, cuando ‘otra vez sopa’ nos prometen, los que quieren gobernar el tiempo que viene, y que nos desafían como nos desafiaron los anteriores y los anteriores de los anteriores, y siempre terminamos encontrando la vuelta y creyendo –como vos- en nuestra clase y nuestro pueblo, para terminar rebelándonos a pesar de la subestimación que nos hacen. Chau Tigre…”.