26 años. Casada, tuvo un hijo de nombre Facundo Manuel Rojas, que falleció en el año 2014. Su esposo era Néstor Washington Rojas Pérez (ver su registro). Ana estuvo ligada a las luchas de los trabajadores navales en el sindicato de los Astilleros de Zona Norte del Gran Buenos Aires, localidades de Tigre y San Fernando. Conjuntamente con su marido fueron secuestrados por las fuerzas represivas en en el domicilio que poseían en esa segunda localidad (calle Córdoba Nº 1651. San Fernando) el 23 de junio de 1976, en presencia de vecinos. Posteriormente, en represalia por la bomba que Montoneros hizo explotar en el comedor policial de la Superintendencia de Seguridad Federal, que dejó un tendal de 23 muertos y 60 heridos; el 2 de julio de ese mismo año, ambos fueron sacados de su encierro clandestino y un día mas tarde (3-7-76), a las 8,30 horas de la mañana, sus cuerpos juntos a los de otras 6 personas, aparecen acribillados a balazos en cráneo, tórax y abdomen, en una playa de estacionamiento denominada “El Abuelo” (calle Chacabuco 639. Muy cerca a la explosión anterior. Una clara venganza). Junto a los cuerpos sin vida, había un cartel confeccionado por los victimarios que decía: “Somos Montoneros. Ayer matamos inocentes. Civiles y policías argentinos. ¿Por qué luchamos? Por dinero, comunismo, un nuevo imperialismo, Muera Argentina”. Obtuso mensaje de una ultraderecha sanguinaria que se movía impunemente en los pliegues de un Estado Terrorista. En la imagen que ilustra esta nota se ve a Néstor Washington Rojas Pérez y su mujer, Ana Trinidad Rodriguez, en la ceremonia religiosa del bautismo de su hijo Facundo Manuel.