Roberto
Baschetti

Cerrudo, Juan José

“Mono”. “Juanjo”. Trabajaba en una metalúrgica en Pompeya. Vivía en una zona llamada Villa Constitución, próxima a la Feria de La Salada, en el partido de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires. Pibe de barrio, descollaba por su habilidad en los partidos de fútbol. Militaba en la Juventud Peronista donde se lo conocía como un compañero muy responsable. Lo secuestraron en su casa, en la madrugada del 30 de marzo de 1978, junto a su mujer. A ella la liberaron y pudo dar testimonio de que ambos fueron a parar al CCD Pozo de Quilmes. Que la noche en que la liberaron, los guardias le dejaron ver a Juan José, por lo que pudo darle un abrazo. Que le preguntó cómo estaba y le dijo que le habían pasado la picana. No lo vio nunca más. El “Mono” Cerrudo dejó al momento de morir, un hijo de tan sólo dos meses de vida, que se llama Facundo. Olga Beatriz Miranda, la esposa antes mencionada, dice sobre Cerrudo: “Juanjo fue la persona más inteligente y sensible a la injusticia social, que conocí en mi vida, con claridad de pensamiento y una simplicidad increíble para explicarlo, lo llevaba en la sangre. Quería un mundo más justo, con igualdad de derechos y posibilidades. Era una gran persona, con buenos deseos, con un amor inmenso por su familia”.