Roberto
Baschetti

Alari, Blas Juan

Fue el menor de 5 hermanos. Secretario General de la Federación de Obreros y Empleados de la Industria del Papel, Cartón y Químicos, comenzó como miembro de la comisión interna de Celulosa Argentina y resultó electo secretario general del gremio en 1964. Desde el peronismo histórico que profesó a lo largo de su vida, enfrentó a todas las dictaduras militares con un alto grado de conciencia y combatividad. Convencido de la necesidad de un reparto más equitativo de la riqueza, apuntó sus críticas a la impoluta clase empresaria de nuestro país. “En Europa y los EE.UU. los empresarios retiran a lo sumo el 30% de lo que sus negocios reditúan, en Argentina, los ‘patrones’ se llevan la friolera del 45%, ya se trate de tiempos de crisis o de bonanzas. Sus niveles de rentabilidad jamás disminuyen. Si no sabemos cual es la rentabilidad real de la empresa para la que trabajamos, jamás podremos discutir seriamente los derechos y las obligaciones de las partes involucradas dentro de cualquier proceso productivo. No se puede colocar el carro delante del caballo, así no llegaremos a destino alguno. Si los dirigentes sindicales no advertimos a tiempo que la discusión tras el armado de un potencial ‘Pacto Social’ excede holgadamente a la mera discusión salarial, estaríamos convirtiendo a los trabajadores en campanas de palo, a los que sólo se les ‘permite’ alzar su voz para pedir una limosna. No debemos olvidar qué en los medios de comunicación social, los silencios pueden pesar tanto o más que las propias palabras. A propósito:¿Cuántas veces ha leído usted ‘los empresarios quieren discutir sus salarios’, Seguramente nunca. Pues a esto me refiero, cuando hablo de invertir la pirámide de la discusión: no se trata de saber cuánto perciben los trabajadores… necesitamos conocer cuánto ganan los empresarios”. Falleció el 13 de octubre de 2015. “Fue un batallador incansable de las reivindicaciones y derechos de los trabajadores, que llevó al gremio al justo lugar que correspondía. Lidió con los cambios que se fueron produciendo en las obras sociales sindicales, y mantuvo en lo más alto la bandera de la salud de la familia papelera”, señalaron desde la organización gremial. Además, recordaron que “con el Compañero Alari como Secretario General, los trabajadores papeleros logramos mantener todas nuestras conquistas y ampliarlas, tanto en el orden sindical como en beneficios sociales y para la salud”. Cabe acotar que de su autoría y editado por su Federación, se dio a conocer en 1992, el libro titulado “Ideas y perspectivas para el sindicalismo”. Del mismo modo, muchos lo recuerdan porque al haber sido designado delegado ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Ginebra-Suiza, trabajó de manera incansable por la integración latinoamericana.