Roberto
Baschetti

Abal Medina, Fernando Luis

“Germán”. Nació en 1948. Era un tipo más bien alto, flaco, joven y simpático, con cierta áurea aventurera que transmitía una gran seguridad en sus acciones. Su adolescencia la vivió en el barrio de San Telmo. Como sus padres (Antonio y Carmen) y sus hermanos, fue parte de la Acción Católica Argentina y desde los 12 años se integró a la Juventud Estudiantil Católica (JEC), del Colegio Nacional Buenos Aires, que tenía como asesor al Padre Mugica. Tuvo un breve paso por la Guardia Restauradora Nacionalista (GRN). Se ganaba la vida, por entonces, vendiendo libros nacionalistas de la editorial Pleamar. Estudiando en el Colegio Nacional Buenos Aires (promoción 64), serán sus amigos y compañeros de curso, Carlos Ramus y Mario Eduardo Firmenich. Terminó sus estudios en 1964. Comenzó su militancia concreta conjuntamente con ellos dos, en el grupo católico (JEC), mencionado anteriormente. En el Chaco santafecino comprobó personalmente la pobreza en que estaba sumergida gran parte de nuestra población. Profundizó su compromiso cristiano y descubrió el peronismo. Paralelamente, a nivel universitario, comenzó a cursar economía política en la Universidad de Buenos Aires (UBA) donde fundó con otros compañeros la agrupación estudiantil Movimiento Universitario Popular (MUP). En 1966, participó como activista político, en la defensa de los derechos de los trabajadores portuarios en lucha contra la dictadura de Onganía. Fue integrante de los Comandos “Camilo Torres” dirigidos por Juan García Elorrio. En 1967, recibió entrenamiento militar en Cuba. Un año más tarde junto a otros compañeros conforma los Comandos “Juan José Valle”. Fundador de Montoneros. Es uno de los secuestradores del general Aramburu el 29 de mayo de 1970. El 7 de septiembre del mismo año cae en combate cercado por una patrulla de la policía provincial en la pizzería “La Rueda” de la localidad de William Morris, provincia de Buenos Aires. La militancia partidaria, recuerda todos los 7 de septiembre, cada año, como “El Día del Montonero”. El prestigioso periodista y literato Luis Alberto Murray, dirá oportunamente: “Fernando -católico, nacionalista, peronista- fue amigo mío; sentí su desaparición visceralmente, como la de un hijo. Por lo mismo, en él personifico a todos los combatientes –sin excepción- caídos en la lucha por la liberación nacional”. Ahora estamos en mayo de 2023. Acabo de terminar de leer el libro “Conocer a Perón” escrito por Juan Manuel, hermano de Fernando. Allí se dice que: “El velorio fue en la casa de mis padres, donde fue incesante el paso de gran cantidad de amigos de las agrupaciones católicas y nacionalistas, así como muchos compañeros que se identificaban con diversos grupos peronistas (…) La prensa destacó que el féretro estaba colocado frente a un cuadro de grandes dimensiones que representa el fusilamiento de Dorrego y tenía la leyenda: ‘Han de estar contentos los salvajes unitarios. Lavalle ha mandado a matar al más valiente’. Arturo Jauretche, mirando el cuadro, le dijo a mi hermano Mario: ‘Premonitorio, premonitorio …’ (…) A las 20,25 llegó una gran corona enviada por el general Perón. Debía ser entregada a las 20,25 recordando que era la hora en que Eva Perón entró en la inmortalidad”.