“Pochi”. Tenía 7 hermanos. Nació en Plaza Huincul, Neuquén, el 3 de septiembre de 1943. 33 años. Secuestrado-desaparecido el 14 de diciembre de 1976 en las inmediaciones de la refinería de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), en Ensenada, provincia de Buenos Aires. También trabajó en los pozos de YPF, en Cutral-Có, Neuquén. Siempre militó en el Sindicato Único Petroleros del Estado (SUPE), siendo delegado gremial y muy posiblemente, al decir de su hija Adriana, militante peronista y montonero. Parece que cuando lo “desaparecieron” estaba tratando de impulsar una huelga por mejores condiciones de trabajo en la destilería de Ensenada. Intentaba con otros compañeros, paralizar la planta de alquimación del lugar; pararla, requería solamente de 48 horas, pero volver a ponerla en funcionamiento era imposible antes de 30 días y eso sería un golpe económico importante para la dictadura. El 14 de diciembre fue a trabajar y a la salida del laburo se quedó con un compañero en la parada de tren que hay dentro de la propia destilería. De golpe aparecieron dos coches con tipos armados que lo llamaron por su apellido, se dio vuelta, lo metieron de prepo en uno de esos vehículos y se lo llevaron para siempre. Después se supo eran de la Marina. Pasó por el CCD Astilleros Río Santiago. Terminó en los vuelos de la muerte. Adriana Abarzúa estuvo presente el 24 de marzo de 2013 en Cutral-Có, Neuquén, cuando los compañeros de trabajo de su padre y la empresa pusieron una placa recordatoria en su memoria. El 19 de noviembre de 2022, se supo, por iniciativa de la regional Ensenada del sindicato de los petroleros se puso una placa con su nombre en Berisso y el de los demás trabajadores del ramo asesinados, estando presente familiares, los intendentes de esa localidad y de Ensenada, el presidente de la petrolera YPF y sindicalistas.