“Lucía”. “La Flaca”. Tucumana, hija única, peronista desde la cuna. María Cristina Bustos de Coronel. Viuda. Abogada. Pasó por el Peronismo de Base. Militante montonera. Como empleada del Ministerio de Trabajo defendió el derecho de los obreros en los ingenios azucareros. Sus compañeros de trabajo y/o militancia la recuerdan “por sus convicciones fuertes y claras, donde quería cambiar al mundo y profundizar la revolución peronista”; defensora de presos políticos, siguió el caso de su compañero (José Carlos Coronel. Ver su registro) que había sido encarcelado en 1971. Con la amnistía de Cámpora, Coronel fue liberado y se casó con María Cristina Bustos, el 7 de septiembre de 1973. Se mudaron a Buenos Aires. Ella fue secuestrada-desaparecida el 14 de marzo de 1977 a la edad de 32 años por un grupo de tareas de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA). Sus hijas María y Lucía la recordaron en el 2001, en Página 12, en un nuevo aniversario de su secuestro con estrofas de una canción de Daniel Viglietti: “Pero la veo: Compañera / pero yo digo mujer entera / pero yo grito: guerrillera”.