Trabajador. Hombre de la Resistencia Peronista. Participó de todas las luchas contra las dictaduras cívicas militares y los gobiernos genuflexos que permitieron la proscripción del peronismo Dirigente sindical, dirigió el gremio de los mineros (AOMA) durante cuatro décadas. Falleció a la edad de 91 años en Paraná, Entre Ríos, el miércoles 13 de julio de 2016. El actual secretario general de AOMA –Héctor Laplace- lo despidió con estas sentidas palabras: “La noticia del fallecimiento del compañero Carlos Raúl Cabrera nos pone muy tristes y nos duele. Toda la familia minera argentina se muestra enlutada por esta inexorable noticia. No obstante, debo confesar el profundo sentimiento de agradecimiento y respeto hacia su figura. Una emoción que me despierta el orgullo de haber sido parte de su equipo de conducción. De haber recibido en forma directa sus enseñanzas y consejos. Esos que me dio hace 35 años, cuando comencé en la militancia sindical dentro de AOMA, y los que seguí escuchando, hasta no hace mucho, hacia nuestra actual gestión. El paso de los años nunca le impidió mantenerse al día de lo que sucedía en nuestra actividad. Si gran parte de la sociedad al sentir la pronunciación de la sigla AOMA la relaciona en forma directa con la actividad minera, es justo reconocer que, pronunciar la palabra Minería es sinónimo de Carlos Raúl Cabrera. Un dirigente sindical que supo encolumnar a todos los trabajadores de la actividad minera detrás de un proyecto sindical vigoroso, auténtico, honesto y transformador. Por eso, sin temor a equivocarme, decir hoy minería o AOMA, es expresar el nombre de Carlos Raúl Cabrera. Fue un dirigente que se convirtió en una pieza vital del movimiento obrero argentino. No sólo dirigió, como Secretario General, los destinos de la Asociación Obrera Minera Argentina, durante 44 años; fue un activo protagonista del rol trascendental de las 62 Organizaciones Peronistas; protagonista principal del regreso del General Juan Domingo Perón a la Argentina; fue un luchador de la resistencia sindical contra el sangriento proceso militar y un baluarte en la vuelta de la democracia (…) Hoy, la noticia de su fallecimiento nos llena de tristeza. Más, para aquellos que hemos sido sus discípulos, y estamos orgullosos de su acción y temple. Su legado está más vivo que nunca. Su herencia sindical la vemos plasmada en esa juventud sindical que sabe de él y de su obra. Por eso no nos extrañó que en la provincia de San Juan un barrio de trabajadores mineros lleve su nombre, así como el salón de actos de nuestra sede central o los reiterados homenajes que nuestra gente le hizo en vida. Él nos enseñó el valor de la lealtad y cosechó lealtad. La industria minera hoy despide a un referente consagrado desde su entrega y convicción. Hoy nuestro gremio resalta más que nunca su legado y el sindicalismo argentino despide a un luchador de la clase trabajadora; a un peronista de raza que llevaba la patria en la sangre. Gracias por todo Carlos, seguiremos llevando en lo alto tus banderas, que son nuestro presente y lineamiento de búsqueda permanente del bienestar del trabajador, para que nuestra Nación sea grande, libre, justa y soberana, como lo deseaba Juan Domingo Perón y Evita. Como la anhelaba él, Carlos Raúl Cabrera”.