“Chacho”. Tenía 36 años. Fue secuestrado-desaparecido en su taller de matricería, en Beccar, provincia de Buenos Aires, la noche del 18 de junio de 1976. Tenía dos hijos de 7 y 8 años. Del relato de su esposa surge que, después del incendio que se produjo en la villa de emergencia Uruguay, Carlos ayudaba a la gente junto con una Unidad Básica de la zona. Tenía militancia barrial. A la fecha continúa desaparecido. Un obituario en “Página 12” del lunes 19 de junio de 2006 dice que “A 30 años sigue vivo en nosotros el recuerdo de tu lucha y entrega por los más necesitados. Juicio y castigo a todos los genocidas (…) ¡Hasta la victoria siempre!”