“Tono” Dean, era dirigente de las Ligas Agrarias Santafesinas, oriundo de Moussy, distrito Avellaneda, departamento Obligado, provincia de Santa Fe. Nacido en agosto de 1948. Tenía 9 hermanos. De baja estatura y carácter sociable. Su primera actividad político-social es en el Movimiento Rural Católico. Con la constitución de las Ligas Agrarias se convierte en su delegado y se “camina” todo el norte de Santa Fe. Siempre peronista asume el compromiso político de los Montoneros. De ideas claras, decidido, baja un discurso sencillo y claro que lograr galvanizar la lucha y las esperanzas de los campesinos y peones de la zona. Lógicamente por su accionar y compromiso es ferozmente perseguido por la dictadura militar que a sangre y fuego se instala en nuestro país desde marzo de 1976. Con su novia María Luisa Bregant (ver su registro) y cuatro agraristas santafesinos más, a partir de noviembre de ese fatídico año, comenzarán una experiencia inédita de supervivencia, resistencia y nomadismo sorprendente, durante casi tres años, ayudados por colonos y acosados permanentemente por las FF.AA. Al grupo se suman más perseguidos, llegando a ser 10 adultos y 3 niños. A fines de 1979 todos logran refugiarse en Europa. Antes de salir del país Arturo se casa con su novia. Retornan ambos a la Argentina en 1980 para recomenzar la lucha y organización de las Ligas Agrarias. Estuvo en Buenos Aires, Viedma y Paraná; llevaba consigo un equipo de comunicaciones a través del cual hacía llegar la voz de la resistencia los pobladores de esas zonas. Cuando cruzó el puente internacional de Paso de los Libres, Corrientes, el 20 de junio de 1980, fue secuestrado y desaparecido junto a su compañera. Como homenaje a su militancia, vale recordar un segmento del discurso de Dean ante cuatro mil agricultores, en una asamblea campesina con la presencia del gobernador Carlos Silvestre Begnis en Santa fe, el 31 de octubre de 1973 donde dejó claro, públicamente que: “Las Ligas Agrarias del país, que la integran casi 9 provincias, hemos decidido desplazar definitivamente al imperialismo de nuestro suelo patrio, y lo vamos a desplazar organizadamente, en actos como este, donde se van a denunciar sus maniobras, haciendo posible que todos participemos para que nos sintamos artífices de nuestro propio destino”.