Roberto
Baschetti

Díaz, Juan Carlos Emilio

Nacido en Tucumán en 1938. Su padre fue ferroviario foquista en el Mitre, su madre ama de casa y él y sus hermanos labraban la tierra. Su hogar era una de las dos Unidades Básicas del pueblo de Lamadrid, ubicado 100 kilómetros al Norte de la capital provincial. También ferroviario y luego metalúrgico. Después de la caída de Perón por un golpe militar en 1955 se sumó al Comando “17 de Octubre” en su provincia natal actuando en varios actos de sabotaje. La gelinita venía del altiplano, por amigos que estaban bajo las órdenes del minero boliviano y líder gremial Juan Lechin. Inclusive se dio el lujo con otros compañeros peronistas de recuperar una copia de la película “La cabalgata del circo” que la dictadura había ordenado pasar en todos los cines del país para tratar de difamar a Evita. Esa copia fue enviada como regalo de los Comandos a Perón, que estaba en Panamá. Con otros 17 compañeros organizaron la guerrilla rural de los Uturuncos, (HombresTigres en lengua quechua) bajo el nombre de “Ejército de Liberación Nacional – Comando 17 de Octubre”. Una viejita peronista muy luchadora a la que todos reconocían como “La Tía Mari” le dijo: “Vos te vas a llamar El Uturunco” y así le quedó ese nombre de guerra. (No confundir con el “Comandante Uturunco” que era el “Gallego” Mena). La misma Mari, conjuntamente con otras compañeras (Tránsito y Rosa), cosieron la bandera de la flamante organización peronista. Rosa inclusive vendió su casa y le dio el dinero a los guerrilleros. Salieron para el monte el 15 de julio de 1959 a las 6 de la mañana bajo una lluvia torrencial. Para más datos sobre esta empresa insurreccional ver los registros de Félix Francisco Serravalle, Enrique Manuel Mena y Felipe Genaro Carabajal. Fue arrestado con los pies en carne viva el 1° de enero de 1960 luego de la desbandada general. Le dieron 8 años de prisión. Lo amnistió el gobierno del Dr. Arturo Illia en 1963. Un disparo que rozó su sien derecha cuando peleaba por el retorno de Perón, allá en el monte, le provocó una sensible disminución de la vista. Cayó nuevamente detenido en 1970 al participar del asalto al Banco Comercial del Norte y fue amnistiado el 25 de mayo de 1973 por el Dr. Héctor J. Cámpora. Al borde de una situación económica desesperante, el gobierno Justicialista de Tucumán ese mismo año le otorgó un subsidio de 35 mil pesos viejos. Le preguntaron si estaba arrepentido de su accionar guerrillero; contestó: “No, al contrario. Creo que nosotros marcamos una etapa. Le enseñamos al pueblo que en forma organizada el enemigo que lo oprime deja de ser invencible”. Las últimas noticias que me llegan de Tucumán (agosto de 2017) es que este compañero –militante inquebrantable- se ha sumado a Unidad Ciudadana en esa provincia y sigue las banderas peronistas que defiende a nivel nacional Cristina Fernández de Kirchner. Pero ahora, el dolor. El portal “Tucumán Hoy” nos comunica que “Juan Carlos Díaz, más conocido como ‘El Ciego Díaz’ o ‘El Uturunco Díaz’, apagó este miércoles (6-5-2020) la vida de sus más de 80 años. Su participación fue esencial para encontrar el Pozo de Vargas, sitio utilizado por los genocidas para arrojar a los desaparecidos durante la última dictadura civico-militar. Gracias a su investigación se localizó la fosa en donde se arrojaron los restos de 117 personas, entre ellos sus compañeros de militancia peronista”.