Roberto
Baschetti

Diéguez, Susana Isabel

La Agencia Paco Urondo emitió la siguiente noticia con fecha 21 de abril de 2023. “A los 75 años (en Río Negro, aclaro yo) falleció la dirigente peronista Susana Diéguez, una noticia que conmocionó a la militancia política. De larguísima trayectoria, Diéguez fue una sobreviviente a la dictadura genocida. Militó en la Juventud Peronista y en Montoneros. Con el regreso de la democracia, tuvo una extensa participación política y gremial. Formó parte de la Comisión de la Memoria, Verdad y Justicia de Viedma. Desde 2003, Diéguez abrazó con pasión las políticas llevadas adelante por el kirchnerismo. Entre 2011 y 2015 fue legisladora provincial por el Frente de Todos” y antes, Secretaria del Bloque de Concejales del Frente para la Victoria local. Susana tuvo un abuelo anarquista y un padre peronista resistente. Así que la militancia para ella no era algo desconocido. Cuenta que cuando fue secuestrada por los militares (madrugada del 19 de abril de 1977) y torturada con saña en el CCD “El Atlético”, el “interrogador” que estaba al lado del que torturaba, le dijo: “Esto te pasa porque no te quedaste en tu casa cuidando a tus hijos, cambiando pañales”. Que era el modelo que estos retrógrados medievales reservaban para la mujer: callada, sumisa y en la cocina. Como todas también fue violada por sus captores. Susana, comenzó su militancia en la Villa de Retiro alfabetizando –ya era maestra- y luego en la Unidad Básica “Felipe Vallese” que tenía su Viejo. También pasó por la Juventud Trabajadora Peronista (JTP). Ella y tantas otras militaban a la par de los hombres. Pero no siempre ese esfuerzo era reconocido por los propios compañeros. Con motivo de su deceso, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) la despidió con profundo dolor, por ser “una enorme militante, fundadora de la Agrupación Celeste de la Ciudad de Buenos Aires y protagonista de primer orden en la construcción de nuestra organización sindical y de la CTERA. Su amor por el pueblo y su indestructible convicción política la llevaron a enfrentarse con la Dictadura genocida habiendo padecido en primera persona, las atrocidades de ese régimen de oprobio (…) El retorno de la democracia la encontró de lleno en la organización y siendo varias veces conducción de la ya histórica Unión de Maestros Primarios y participó activamente de las luchas que se libraron en el marco de la sindicalización de las maestras y profesores de la ciudad. En el murmullo de la Marcha Blanca, entre miles de voces, se distingue aún la palabra de Susana, su prédica incansable, sus canciones de lucha y esperanza. Su prédica política y sindical anida en el corazón de quienes hoy llevamos adelante nuestro sindicato. La Unión de Trabajadores de la Educación tiene la impronta de aquellas compañeras que, como Susana, la soñaron y la parieron para luchar por una sociedad mejor, por una Patria Justa, Libre y Soberana. ¡¡Hasta la Victoria Siempre Compañera Susana!!”.