Nació el 25 de julio de 1936. Empleado de la empresa “Particulares” llegó a delegado sindical en la misma empresa y luego a secretario general del sindicato del Tabaco, organismo gremial combativo que fue refugio de miles de militantes para reuniones, plenarios y declaraciones. Resistente peronista combatió a todas las dictaduras militares del ’55 en adelante. Fue parte de la CGT de los Argentinos que lideraba Raimundo Ongaro. Enfrentó siempre a la burocracia sindical y denunció un complot de ésta para defenestrar a Saul Ubaldini luego de la vuelta de la democracia. Antes, durante la última dictadura civil y militar, torturado, luego exiliado en Venezuela, integra de forma clandestina la delegación obrera a la Organización Internacional del Trabajo (OIT); siendo además uno de los convocantes al primer paro y huelga general que se le hizo a aquella dictadura, el 27 de abril de 1979, a través de la “Comisión de los 25”. Le valió ir a la cárcel –una vez más- por un corto tiempo. Fue cofundador de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y 2 veces elegido diputado por el Peronismo con el voto popular. En 1983 integró dentro del Peronismo, el Movimiento Unidad Solidaridad y Organización (MUSO). Boquense de corazón fue secretario general del Club y enfrentó a Macri y su cria PRO-cesista dentro del CABJ, cuando estos llegaban para hacer negocios en beneficio propio con la compra y venta de jugadores. En la gestión de Ameal-Riquelme fue vicepresidente tercero de Boca Juniors, hasta que lo sorprendió la muerte, por Covid, el 30 de enero de 2022. Siempre se lo va a recordar como paradigma de dirigente sindical honesto y combativo. Una persona de bien, además. Su última aparición pública fue en la película documental de David “Coco” Blaustein, “Se va a acabar” donde se refleja la lucha obrera y sindical desde las bases contra la dictadura.