“La Negra”. Más conocida como Nélida de Miguel por su apellido de casada. Su padre, militante socialista, se acercó al peronismo. Ella tuvo 5 hermanos. El 17 de Octubre de 1945 se la vio en una marcha de los trabajadores gasistas portando una bandera argentina y luego fue la encargada en el Instituto Malbrán de organizar una cena de apoyo a la candidatura del general Perón para las elecciones de febrero del 1946. Así conoció a Ramón Carrillo y este a su vez se la presentó a Evita y de ahí en más Domínguez colaboró con la primera dama. Fue delegada censista en La Rioja y gestora de la abertura de unidades básicas peronistas femeninas en donde se desarrollaban acciones comunitarias y de aprendizaje laboral. Su labor descollante hizo que fuera designada para hacer las mismas tareas en la provincia de Tucumán. Y allí fue. Su amor por la causa peronista la llevó a una crisis de pareja con su marido y se separó teniendo ya dos hijas, pero conservó el apellido de su ex para las tareas partidarias. Fue una de las mujeres elegidas por Juan Domingo Perón para acompañar la cureña con los restos mortales de Evita en un triste, frio y lluvioso mes de julio de 1952. El 4 de noviembre de 1953 fue designada por Perón como secretaria política del Consejo Superior del Partido Peronista Femenino (PPF) e integró la Comisión Pro Monumento Eva Perón en representación de ese mismo PPF. Fue electa diputada nacional en 1954. Tras el golpe militar gorila de setiembre de 1955 tuvo pedido de captura y permaneció privada de su libertad durante tres meses en la provincia de Tucumán; no le pudieron probar nada y la tuvieron que soltar. Al recobrar la libertad se sumó a la Resistencia Peronista. Repartía volantes, documentos y directivas; confeccionaba ropa para los presos políticos y los proveía de asistencia alimentaria cuando hacía falta. “Polvorita” ella, se sumó a la barra que en el Congreso Extraordinario de la Confederación General del Trabajo (CGT) del año 1957, cantó la Marcha Peronista a voz de cuello ante la mirada asombrada e incrédula a la vez, de los gorilas del interventor marino Patrón Laplacette allí presentes. En 1959 puso su cuerpo y su corazón, y se sumó a la marcha por las calles del barrio de Mataderos en defensa y apoyo de los trabajadores del Frigorífico Nacional Lisandro de la Torre que luego terminó en una batalla campal en procura de que no fuera privatizado por el gobierno entreguista de Frondizi. Estuvo en la lista de diputados electos por el peronismo en marzo de 1962, por provincia de Buenos Aires, con el candidato a gobernador Andrés Framini. Ganaron, pero nunca pudieron asumir, porque el verdadero poder detrás del trono, eran las FF.AA. profundamente antiperonistas en la ocasión. En 1970 (dictadura de Onganía) con otros compañeros empapelaron la Capital Federal con un afiche gráfico de grandes dimensiones en donde se preguntaban: “¿Dónde está el cuerpo de Evita?”. Formó parte del regreso de Perón a la Argentina el 17 de noviembre de 1972, en el chárter que traía al General luego de 17 años de injusto exilio. Durante la última dictadura cívico-militar que asoló nuestra patria, se supo que se acercó a Deolindo Felipe Bittel, referente del Partido Justicialista y realizó gestiones para saber sobre personas “desaparecidas”. Falleció en Buenos Aires, el 11 de noviembre de 2021.