Roberto
Baschetti

Gallardo, Felipe

Chaco, fue primero Territorio Nacional (conforme a la ley 1532 del 13 de octubre de 1884) y el 12 de abril de 1953 se llevaron a cabo las elecciones generales para designar los candidatos de esa nueva y flamante provincia que llevaría el nombre de “Presidente Perón” (mantuvo ese nombre hasta la caída de éste en 1955). Bueno, en esas elecciones es elegido gobernador Felipe Gallardo, nada menos que gobernador obrero. Le dio su confianza más del 90% del electorado, sacando 124.865 votos (el segundo sacó 4.978 sufragios). Dicen que Evita fue quien defendió su candidatura, aún a expensas de Perón, que no estaba muy de acuerdo. Su gestión se dedicó a dar apoyo a los pequeños productores y en tal sentido llevó adelante la expropiación de Bunge & Born en General San Martín. Perón le aconseja que no la haga, pero Gallardo la hace igual y a partir de ese hecho, fue que el Presidente de la República, le dice “de ahora en más arregláte con Evita”. Precisamente fue con ella que forjaron la constitución provincial, tomando como base la Constitución de la Yugoslavia del Mariscal Tito, con representaciones con mayoría de diputados obreros. Puede decirse que era una constitución clasista. Inclusive, según el historiador Eduardo Barreto, el presidente chileno Salvador Allende, pidió un ejemplar de la constitución chaqueña de 1951, en el momento que se estaba estudiando una reforma constitucional en el país trasandino, tomando algunos párrafos como referencia para la nueva carta magna. El preámbulo de esa carta decía así: “Nos los representantes del pueblo trabajador de la Provincia Presidente Perón…”. Felipe Gallardo nació en Villa Ana, pero fue anotado en Villa Ocampo, provincia de Santa Fe, el 23 de agosto de 1915, en un hogar muy humilde y de escasos recursos económicos. Estuvo casado y tuvo seis hijos. Trabajó en La Forestal hasta 1931, cuando lo dejaron cesante por su activa militancia en la Unión Cívica Radical Yrigoyenista. Un año antes, en 1930, había estado preso cuando ocurrió el golpe de Uriburu. Emigró al Chaco y posteriormente se radicó en El Zapallar (hoy General José de San Martín), donde militó en el movimiento gremial y le valió su postulación para Convencional Constituyente en 1951. Gallardo afirmó en su discurso pronunciado en mayo de 1953, una vez elegido gobernador: “Yo no tengo títulos de ninguna naturaleza. El único título que poseo es el de ser trabajador y peronista. A mí Perón me sacó del montón y me puso aquí”. Se lo recuerda con una honestidad y honradez intachables. Inició una reforma agraria distribuyendo tierras fiscales y expropiando latifundios improductivos. Creo escuelas, caminos y servicios públicos esenciales. Gobernó dos años y tres meses. Renunció el 20 de septiembre de 1955 a consecuencia de la autodenominada “Revolución Libertadora”. Regresó a General San Martín con su familia. El 6 de octubre del mismo año fue detenido en la ciudad de Resistencia por peronista. La razón de su detención –además del odio de clase implícito en cada uno de los actos de la “Fusiladora”- fue que en agosto de 1955 como gobernador provincial ordenó al jefe de policía de su provincia (Benito Yañez) que llevara unas 500 armas hacia la residencia gubernativa para ser entregada a funcionarios, empleados públicos y dirigentes sindicales en pos de la defensa del orden constitucional. Recobró su libertad el 23 de diciembre de 1957. Estuvo todo ese tiempo preso por no poder pagar un abogado. En los ’70 apoyó con todo a la Juventud Peronista y a la Tendencia Revolucionaria, por considerarlas como las únicas que podían llevar adelante la postergada Revolución Peronista. Desde marzo de 1975 fue integrante de la Junta Promotora Nacional del Partido Peronista Auténtico (PPA) por su provincia, enfrentando así la traición isabelina. Falleció el 13 de julio de 1996, a los 80 años. Había dejado dicho que no se enviaran coronas de flores a su velatorio y que el importe, fuera enviado a las cooperadoras del hospital y centro de salud de su pueblo adoptivo.