Roberto
Baschetti

Gasparri, Mario

Profesor de Historia. Titular del Archivo Histórico de la Confederación del Trabajo (CGT) y del Centro de Documentación Eva Perón. A través de innumerables charlas y debates, de las que formó parte, llevó a la CGT a la calle, a la gente común. Fue coautor –junto a Claudio Panella- del libro “El Congreso Normalizador de la CGT de 1957, resistencia obrera y surgimiento de las 62 Organizaciones” explicando así la recuperación de los sindicatos para Perón y el Peronismo luego del golpe del ’55. Otra de sus labores intelectuales de importancia fue la realización de los “Congresos de Historia del Movimiento Obrero”, uno de ellos se realizó en la Biblioteca Nacional y allí lo conocí y mantuvimos una relación de aprecio y respeto mutuo que nos acompañó hasta su deceso. También fue Director del Archivo Histórico de la Provincia de Buenos Aires entre los años 1992-1999. Falleció víctima de una penosa enfermedad el 7 de marzo de 2014. Quien se suma a este recordatorio y mejor lo retrata es su amigo Ernesto Jauretche: “Mario fue uno más de los hombres que conservaron la esencia de los revolucionarios incorregibles de todos los tiempos. Nacido en 1945 en Punta Alta. Espléndido tipo de hombre, desprendido de bienes, generosos de la idea, combatiente de la esperanza, ejemplar entre los que salieron un 17 de octubre a conquistar el futuro. Habitante y propagandista del alma de nuestra clase obrera. Intelectual orgánico del peronismo y hermano de los pobres. Camarada, compinche, cómplice, amigo, confidente, amante, en fin, de la causa popular, compañero, adrenalina y fulgor para nombrarte. Hombre de ley que murió en su ley. Hasta su última hora investigador incansable, la ciencia histórica de los argentinos le debe haber encontrado el puntal en que se apoyan los grandes cambios: los lentos y silenciosos progresos de la conciencia política que emergen en tumultuosos desplazamientos de los pueblos laboriosos; punto de partida de movimientos telúricos que cierran etapas sombrías para abrir luminosos caminos a la esperanza. Mario supo leer y entender las lecciones del subsuelo de la Patria. Interpretó desde su propia experiencia de vida humilde, los misteriosos orígenes de los recurrentes e irreversibles giros, victorias y derrotas, del actor inmanente de las transformaciones sociales y políticas: los trabajadores argentinos”. En los conflictos pasajeros de las organizaciones obreras Mario no era de nadie, porque era de todos. Y, a más de numerosos textos que habrá que revisar para publicar, dejó para el futuro un tesoro inevitable: la biblioteca de la CGT, desde donde rescató, ordenó y preservó la mayor documentación existente sobre la historia del movimiento obrero organizado de nuestro país”. Por último, Jauretche sintetiza la semblanza de su amigo, diciendo que Mario fue un “Vencedor del olvido. Un buen Hombre. ¡Cómo sería de bueno que consiguió que a su despedida concurrieran todas sus ex mujeres! ¡Grande Mario!”.