Roberto
Baschetti

Hernández, Mario Ángel

Abogado, nacido en Mar del Plata el 12 de diciembre de 1936. Ex alumno del Liceo Militar General San Martín recibe su diploma de subteniente de reserva de manos del fusilador Aramburu en 1955. En dicho liceo conoce a Héctor Cámpora (hijo) y a Antonio Perón, un sobrino del General. En 1968 contrae matrimonio con Bárbara Civita, hija del empresario dueño de Editorial Abril. La defensa de numerosos presos políticos y las discusiones o cambios de opiniones sobre la realidad de nuestro país, con interlocutores de la talla de R. Puiggrós, E. Astesano, S. Ferla, A. Jauretche, A. Ramos, F. Chávez y J.M. Rosa, lo llevan a militar en el peronismo combativo. En tal sentido, es en el año 1967, cuando con los honorarios de un juicio ganado, compró unas oficinas sobre la calle Corrientes y fundó el Instituto de Estudios Argentinos y Latinoamericanos (IPEAL), con el objetivo de difundir el pensamiento nacional y contribuir a la incipiente toma de conciencia de amplios sectores de las clases medias. A partir de 1970 toma parte como fundador –junto a E.L. Duhalde, R. Ortega Peña y R. Sinigaglia- de la Asociación Gremial de Abogados y de la Agrupación de Abogados Peronistas de la Capital Federal. Fue el abogado defensor de los militantes peronistas acusados de la muerte de Aramburu y de algunos de los presos políticos masacrados en la “Matanza de Trelew”, el 22 de agosto de 1972. Con la creación de la Juventud Peronista de las Regionales pasa a ser su asesor legal, en la Regional I de Buenos Aires. Su pluma de militante e intelectual tuvo cabida en distintas publicaciones, como “Militancia”, “Mundo Nacionalista” y la cordobesa “Aquí y Ahora” de los hermanos Pérez Gaudio. Inclusive fue el director del primer número de la revista “El Descamisado”. Todo el período que va de 1973 a 1976 lo encuentra en la primera fila de la larga lucha, que emprende en defensa de las banderas del nacionalismo popular revolucionario; como abogado y como militante. Con Eduardo Luis Duhalde (fundador) se suma al Partido Revolucionario de los Obreros Argentinos (PROA). El 11 de mayo de 1976, a menos de dos meses del golpe, es secuestrado por un comando del Ejército, cuando llegaba a su casa de Beccar, en la provincia de Buenos Aires, donde habitaba con su esposa y sus dos hijos. Por supuesto, su casa fue saqueada. Testimonios de personas que lo vieron en Campo de Mayo hablan de una herida en una de sus piernas ocasionada por sus raptores cuando lo aprendieron. Torturado y mal herido falleció pocos días después. Algún sobreviviente del campo de concentración hasta habló de que fue castrado y que dicha salvajada fue filmada por sus verdugos. No dijo nada inconveniente, mantuvo su dignidad siempre, pese a todo. Al momento de su secuestro y posterior desaparición estaba organizando con otros colegas, la Comisión Argentina de Derechos Humanos (CADHU), con el único fin de que se conociese en el exterior de nuestro país el genocidio que estaban llevando a la práctica militares asesinos y oligarcas salvajes, para imponer su plan económico antinacional y antipopular. Cabe acotar que, en la ciudad de Villa Mercedes, San Luis, por ordenanza Nº 1362-o, del 20 de agosto de 2002, hay una calle con su nombre. El 3 de noviembre de 2023, se supo, por el secuestro, torturas y asesinato de Hernández se le dictó prisión perpetua al genocida Santiago Omar Riveros, ex general, amo y señor de Campo de Mayo en épocas dictatoriales, durante 1976.