Miembro originario del grupo FAP (Fuerzas Armadas Peronistas) en La Plata; allí es “Martín”. Participa de la etapa foquista que termina en la integración FAP-PB, un proyecto de clase donde lo militar se usa subordinado a la construcción política. Y allí va Carlos que no es solamente un “fierrero” a hacer trabajo sindical en la zona de Ruta 2 y Varela. Artista con sellos y tintas, a su prolijidad y artesanía, debieron mucho de sus compañeros el documento “yuto” que les permitó sortear la clandestinidad. Durante el “Rodrigazo” fue uno de los pocos que vio claramente la importancia de las movilizaciones obreras y de la coordinación intersindical emergente de dicha situación prerevolucionaria. Durante la dictadura, con perfil bajo, siguió expectante como se desarrollaban los hechos. En democracia retomó la militancia y durante muchos años realizó un trabajo que ligaba lo cultural con lo político en la zona de Berisso. Al decir de sus amigos, murió de una mezcla de enfermedad y tristeza en 1997, en su hogar de City Bell.