Nacida el 24 de enero de 1947 en Monte Quemado, provincia de Santiago del Estero. Dependiendo de la U.B. “Capuano Martínez” (calle Armesti-Temperley), conformó con otros compañeros de la zona un desprendimiento de la misma: la “Ubita” de la Escuela Nº 78 donde Inés se desempeñaba como portera. Y desde allí crecieron políticamente y del colegio se integraron al barrio que veía con alegría como ese grupo de peronistas con muy poco habían hecho el patio, la secretaría y el comedor de la escuela. El mensaje que emanaba era claro: “si nos unimos podemos”. Una auténtica Inés provinciana, tenía un gran predicamento y prestigio en ese ámbito, debido a su innata vocación militante. A las dictaduras militares no les esquivó el bulto, por el contrario, su compromiso aumentaba. Así fue que levantaba chapas de los automóviles o colocaba explosivos en las vías ferreas para detener el servicio de trenes, o volanteaba por las calles Pasco y Salta. En 1975 armó pareja con “Pancho”, el responsable de la “Capuano Martínez” y al arreciar la represión y con la idea de “desensillar hasta que aclare” se fueron a vivir a un pueblito de la provincia de Buenos Aires (Carlos Casares) y tuvieron un hijo. Los esbirros del régimen, se llegaron a la casa de su madre y su hermana en el Barrio San José a buscarla. Al no encontrarla torturaron a ambas con saña hasta que al final la hermana cantó la dirección e Inés del Carmen fue asesinada (no se dejó agarrar con vida) junto a su compañero. Sucedió el 25 de noviembre de 1977. Los militares entregaron el bebé a la abuela paterna.