Simpatizante del peronismo montonero. Residía en el barrio “Los Polacos” en la localidad de Merlo, provincia de Buenos Aires. Durante la última dictadura cívico-militar que padecimos, fue secuestrado-desaparecido y torturado durante un mes. Luego lo soltaron. Aprovechando un contacto con la embajada holandesa en Buenos Aires, partió hacia el exilio. Allí murió de cáncer, sin defensas en su organismo, por la gravedad de las torturas recibidas.