En la foto, la quinta mujer comenzando a contar desde la izquierda, con botas y pelo negro. Tenía 41 años. En provincia de Buenos Aires, era directora de la Escuela Nº 54 de Grand Bourg. Militaba en la Unión de Educadores de General Sarmiento. Fue secuestrada-desaparecida en la propia escuela, el 5 de julio de 1976. Se la vio con vida en el CCD Campo de Mayo antes de su asesinato. La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), tiene en claro, el porqué de su eliminación física por los detentadores del poder en Argentina. “Porque ella y otros compañeros convocaban a dar batalla por algo más profundo que la lucha sindical. Por una filosofía de vida que informara el saber y el hacer del pueblo. Porque su pensamiento tenía un objetivo más amplio: lograr a través de la lucha por la escuela pública, una sociedad más digna y justa en solidaridad con todos los trabajadores y los necesitados”. Y recuerda Ana T. Lorenzo: “Susana integraba los grupos docentes peronistas que trabajaban por la constitución de sindicatos únicos adheridos a la Confederación General del Trabajo (CGT), por la superación de la concepción elitista tradicional del magisterio y por la asunción de la condición de trabajadores por parte de los maestros y profesores”. Otro dato para no olvidar. Cuando Montoneros secuestró a los hermanos Born, una de las clausulas a cumplir por la empresa Molinos Río de la Plata, que era propiedad de ellos (para lograr su liberación), fue repartir entre las barriadas más humildes bolsas de comida, útiles escolares, guardapolvos, etc. Uno de los lugares designados para recibir aquella “donación” fue la Escuela Nº 54 de Grand Bourg y Susana Pertierra, su directora, se preocupó en organizar el reparto para que cada uno de los estudiantes y sus familias carenciadas recibieran lo necesario, para ir al colegio comidos y equipados.