“Chicha”. Mujer de Juventud Peronista y Montoneros. 29 años. Casada con José Vicente Vega (ver su registro). Dice la hija de ambos, Marcela Vega: “Mis padres eran militantes montoneros de Solano, en Quilmes y de Lanús. Estábamos viviendo con los Manfil cuando una madrugada de octubre de 1976, entraron a la casa fuerzas de la policía de la provincia de Buenos Aires, mataron a mi mámá, a Carlos Manfil y su esposa Angélica y a Carlitos Manfil de 8 años. Mi mamá salió a un balcón de la casa y le dijeron que levantara las manos, ella obedeció y dijo que se entregaba que no tiraran más, que había crituras en la casa y cayó del balcón porque ya estaba herida. Cayo del 3º piso y la remataron abajo (…) Yo vi esto porque me había levantado a tomar agua poco antes de que llegaran los policías. Vi todo, como mataron a mi mamá abajo; cuando ella cayó por el balcón la agarraron del pelo, le metieron un tiro y la soltaron, después miraron para arriba y empezaron a disparar. Sí, yo vi todo”. Dicho relato es parte del excelente libro de Noemí Ciollaro, “Hijos del Sur”, editado por la Universidad de Quilmes en abril de 2014. Los hechos relatados ocurrieron exactamente en la madrugada del 27 de octubre de 1976 en el Edificio 6 sito en calles La Fuente y Oyuela de la localidad de Villa Corina, partido de Villa Dominico, en Avellaneda, provincia de Buenos Aires. Quien quiera saber más sobre el hecho debe buscar en esta misma página web los registros de Carlos Laudelino Manfil, su esposa Angélica Zenobia Zárate y también el de José Vicente Vega actores de la tragedia desatada por la represión. Por último, cabe acotar que en el año 1999, sus restos fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y exhumados en el cementerio de Avellaneda.