“Leyendo la noticia sobre el accidente de Colón –Entre Ríos- (29-12-93) noto que el nombre de mi compañero aparece con errores frecuentemente. Esto motivó mi reflexión y quiero compartirla con todos, intentando describirlo en algunos rasgos: Daniel fue un militante de la vida, que vivió para, con y para los demás, asumiendo los distintos compromisos que esto significa. Encarnó, enseñó y transmitió valores no muy usuales en estos tiempos, como: Verdad. Justicia. Solidaridad. Memoria. Luchó, participando con su gremio CTERA; acompañó a Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Buscó dentro del Frente Grande un nuevo cauce para su histórica definición peronista (su anhelado presente utópico) con metas claras: no perder la memoria, hacer fructificar la lucha de tantos compañeros para lograr la dignidad en la vida de todos. Toda su vida fue una gran tarea docente, que con humildad y coherencia volcó en la Escuela San Martín de Porres, acompañado por un grupo de gente comprometida y una comunidad que lucha por modificar este proyecto que no la incluye. Daniel no buscaba el reconocimiento público, quizás por eso el error al nombrarlo, sino la construcción del Reino del Dios de la vida. El lunes 3, Daniel logró una vez más enriquecer nuestras vidas; la despedida en ‘su escuelita’ fue en homenaje a su entrega, a su compromiso, a su solidaridad, a su lucha cotidiana. Lo dejamos ir a Federación, su tierra natal, con un aplauso interminable y cantando sus canciones: ‘Por eso estoy aquí cantando / Por eso estoy aquí soñando / Por el hombre feliz, el hombre nuevo / el hombre que te debo mi país…’. Susana Brardinelli. LC 5.932.627”. (“Página 12”, 12-1-94).