“Vino a estudiar a Córdoba ingeniería, en la UNC. Formó parte y fue militante activo de la Juventud Peronista, en la cual luchó para lograr conquistas sociales y por eso participó activamente en “El Cordobazo” junto a estudiantes, obreros y empleados, peleando por las libertades políticas contra las Fuerzas Armadas, y para derrocar al gobierno dictatorial. En el año 1971 lo detienen en la vía pública, estuvo 30 días detenido en la Cárcel de Encausados y compartió la celda con varios compañeros que luego fueron trasladados a Trelew. Sin rendirse siguió la lucha, siendo perseguido también más tarde, por la Triple A. En 1976 se produce el golpe cívico-militar más sangriento y nefasto de la historia argentina. Por tal motivo lo echaron sin causa de la Municipalidad de Córdoba (la llamada Ley de Prescindibilidad) y lo persiguieron hasta secuestrarlo, llevándolo a La Perla, donde funcionó un centro de detención y tortura clandestino -como ya sabemos-, perteneciente a las Fuerzas Armadas. En este lugar fue torturado sistemáticamente, provocándole daños cerebrales irreparables. A raíz de las secuelas del Terrorismo de Estado quedó postrado hasta quedar totalmente en vida vegetativa llevándolo a la muerte. Quedé junto a mis tres hijos menores, sorteando muchas vicisitudes. Por tal motivo, como compañera de vida he tomado la bandera de lucha de mi marido, trabajando en la Asociación de Ex Presos Políticos de Córdoba, para reivindicar la lucha de todos los compañeros”. Firma María Mercedes “Cicha” Aranguren.