Paranaense nacido el 3 de noviembre de 1953 en la provincia de Entre Ríos. “Chanchito” para la familia. “Pichón” y/o “Lito” para sus amigos. “Emilio” para sus compañeros. Su papá de 36 años se murió cuando él tenía 12, víctima de un cáncer. Allí Andresito decidió que iba a ser médico y que iba a descubrir una vacuna contra ese mal. Y así fue como a principios de los ‘70 se vino para la Capital con el fin de estudiar Medicina. Así mismo su amor por la justicia social lo llevó a militar en el Peronismo de Base (PB) por los barrios. Fue parte asimismo de la organización Descamisados. Luego abandonó los estudios en tercer año de la carrera universitaria e incrementó su compromiso militante: pasó por la Juventud Trabajadora Peronista (JTP) e ingresó a Montoneros. Dejó su trabajo en el Banco Francés e Italiano para la América del Sur (sucursal Villa Ballester, provincia de Buenos Aires), y siguiendo las pautas marcadas por su organización se fue a trabajar a una fábrica donde al poco tiempo contrajo un dolor agudo en la columna vertebral debido a su trabajo en los altos hornos. Fue secuestrado-desaparecido con 23 años de edad, en un viernes santo, el 8 de abril de 1977 al concurrir a una cita en avenida Guzmán entre Concepción Arenal y avenida Jorge Newbery, Parque Los Andes, barrio porteño de la Chacarita. Al día siguiente su esposa y compañera de militancia –Diana Lijtman- que pasó la noche anterior en el hogar de su cuñada, fue a la casa en que vivían juntos preocupada por la desaparición de su marido a ver si encontraba una nota o algo que aclarase la situación y porque además le tenía que dar de comer al gatito que tenían. Al poco tiempo de llegar a la vivienda se le apareció la patota y se la llevó en un coche. Nunca más se supo de ella. (Ver su registro para más datos). Los bestias armados antes de irse tuvieron tiempo para revolver todo y con un puñal despanzurrar al gatito, abriéndolo al medio y dejándolo colgado, al igual que un mensaje mafioso, en la puerta de entrada al departamento de los Uzin. A Andrés lo tuvieron más o menos un mes con vida (CCD “Club Atlético) y luego lo asesinaron y enterraron como N.N. en la Chacarita. Sus restos fueron recuperados en marzo de 1983 por sus familiares; quienes además vieron unas fotos del cadáver de Andresito con el rostro desfigurado, varios disparos en la nuca y marcas de picana y quemadura de cigarrillos en su cuerpo. ¡Ah! … Olvidaba decir, que Andrés Uzín era sobrino del por entonces jefe de la Policía Federal Argentina, general Juan Bautista Sasiaiñ casado con la señora “Goggy” Uzín.