Roberto
Baschetti

Viñas, Oscar Luis

Datos tomados del libro de su autoría “Los colores del andar” que tuve el privilegio de prologar en 2017. “Director de un periódico escolar. Especialista en armas submarinas. Piloto civil. Procurador. Escribano. Director de la Escuela Sindical de la CGT en su terruño. Abogado especializado en Derecho Agrario y Derecho Laboral. Colaborador de las Ligas Agrarias. Militante peronista y montonero. Exiliado político. Profesor universitario, además de llevar adelante varios cargos ejecutivos en México, relativos al ámbito rural. En África, en Mozambique, interviene en un proyecto de ayuda alimentaria para los trabajadores madereros. También a nivel internacional, redactor en la Comisión que se ocupa del Proyecto de Ley de Bosques y Ley de Aguas nada menos, dos de los elementos vitales para la subsistencia del hombre en el siglo XXI. Cooperativista agrario. Consuetudinario colaborador del periódico “Campo Nuevo” dedicado a recuperar las enseñanzas y la historia del agro en el Noroeste argentino, lo que a su vez le permite desempeñarse como Delegado de la Unión de Pequeños Productores Agropecuarios en la provincia de Salta. Asimismo, en el ámbito de las publicaciones periódicas se muestra como avezado coordinador de la revista “Opinión Económica” ligada precisamente a la CGE, organismo donde ostenta diversos cargos de importancia. Asesor en la Jefatura de Gabinete en la Provincia de Formosa, la misma ciudad que lo vio nacer, cerrando así un periplo que abarca su vida en 84 años, intensamente vividos, como se desprende de la presente narrativa y de este texto –memorioso y anecdótico- que ahora Usted tiene entre sus manos (…) Lo conocí a Oscar Luis Viñas hace poco tiempo atrás en el marco de una investigación que llevaba adelante sobre los años sombríos que vivimos los argentinos a partir del golpe cívico-militar del 24 de marzo de 1976. Hombre parco en un principio, a medida que ganamos en confianza mutua, se fue abriendo y contando aspectos y hechos de su existencia que bien pueden exceder el marco biográfico para adentrarse en lo fantástico. La intensidad de su quehacer diario y la convicción de sus ideales, se mantienen, en el tiempo. Al respecto traigo a colación aquella conocida frase del dramaturgo y poeta Eugen Berthold Friedrich Brecht –que por conocida no deja de ser muy cierta- cuando asevera que: “Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos. Pero los hay quienes luchan toda la vida: esos son los imprescindibles”. Y Viñas es de esta clase de hombres: lo fue y lo es. Su compromiso político que lo acompañará toda su vida es claro y preciso: él siempre está posicionado en el campo nacional y popular, del lado de las mayorías y enfrentando al colonialismo rapaz, al capitalismo salvaje y al imperialismo insaciable. Con la instrucción recibida y la profesión alcanzada, bien podría haberse hecho a un lado en lo social y pensar solamente en su satisfacción personal, en el goce de lo material a nivel individual, en el logro mezquino que sabiamente intuye, no lo hace crecer como persona. Hay que volver a citar al dramaturgo alemán, para entender su posición en las convulsionadas décadas de los ’60 y ’70, cuando Oscar Luis Viñas enfrentó poniendo su vida en juego, a quienes venían a conculcar todas las libertades individuales y los valores democráticos colectivos, a punto tal de impedir el voto del pueblo para elegir sus representantes y proscribiendo así a las mayorías. Dirá Brecht: “El analfabeto político es tan ‘burro’ que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que precisamente de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas multinacionales (…) Ante los hechos cotidianos, por favor, no digan: ‘Es natural’. En una época de confusión organizada, de desorden decretado, de arbitrariedad planificada y de humanidad deshumanizada… Nunca digan: ‘Es natural’, para que así todo pueda ser cambiado”. Oscar Luis Viñas estuvo convencido de que eso no era natural. Fue fiel a esos principios y merece nuestro reconocimiento. Falló en el intento de hacer una sociedad más justa e igualitaria y su compromiso como el de tanto otros, fue ahogado a sangre y fuego por los dueños de las armas, de los bancos, de las tierras y de las empresas que nunca estuvieron dispuestos a repartir sus mal habidas ganancias para que nuestro sufrido pueblo pudiera tener salud, trabajo, educación y un futuro digno de ser vivido. Pero este libro que tengo el honor de prologar solo demuestra que la única lucha que se pierde definitivamente es la que no se da”. Lamente decir, que Oscar Luis Viñas falleció luego de severos problemas de salud que lo tuvieron postrado, en la madrugada del domingo 3 de enero de 2021.